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Prohibicion del Polarizado

Las plantas de revisión técnica nuevamente están en el ojo del huracán. La normativa sobre la transparencia de los vidrios de los automóviles en Chile, permite el tintado de vidrios “siempre que permita visibilidad hacia el interior” en los vidrios delanteros, pero también prohíbe “cualquier elemento que comprometa la visibilidad”, por lo que hay una tremenda ambigüedad en torno al tema.

La autoridad permite los vidrios oscurecidos cuando son originales de fábrica (automóviles homologados por el laboratorio 3CV), pero no la instalación de láminas en automóviles que no incluyen este tratamiento originalmente.

Vidrios autos

El problema mayor, es que la autoridad pidió fiscalizar algo que no está claro y las Plantas de Revisión van a fiscalizar algo sin un sustento técnico medible, quedando la fiscalización a un vago criterio que depende del técnico a cargo.

La transparencia de los vidrios es algo medible, existen aparatos para realizar estas mediciones, pero en Chile los estándares no han sido estudiados ni han buscado la forma correcta de fiscalizarlo. El desorden provocado es tal, que hasta hay automóviles con láminas de seguridad transparentes que no logran aprobar la revisión técnica, además de automóviles con tintado de fábrica que son rechazados.

Uno de los problemas más importantes planteados por esta errática fiscalización, es el nivel de radiación solar que existe en Chile, algo bastante mayor al promedio en la mayor parte del mundo. La radiación no es filtrada por la mayoría de los vidrios originales de fábrica, por lo que el sistema de láminas con filtro es una importante alternativa  a la hora de conducir. Como nota al margen, sólo pocos automóviles de alta gama filtran esta radiación además de incluir vidrios laminados más difíciles de romper.

Estos problemas se suman a la constante saturación de las plantas de revisión y confusas fiscalizaciones que se han aplicado, como por ejemplo el uso de luces LED blancas, donde si el técnico lo estima, puede decir que el color no está dentro de la norma, sin medir la temperatura del color que emite realmente.

Queda en evidencia la necesidad de normas de fiscalización más claras y un sistema más serio de homologación de modificaciones, necesidades que dejan una muy desagradable experiencia a los usuarios de un parque automotriz en constante crecimiento.